
Los pies nunca se paran...
Los caminos nunca se acaban... están a medias, son como los cigarros mal apagados en una parada de bus. Por eso siempre se tiene que seguir, las elecciones, los caminos y los pasos llenan de sentido los segundos que marcan la vida.
Un día escuche "que a donde vayas no haya carreteras, que tu huella sea siempre la primera"
Y claro, existen metas. Yo las que quiero son metas que al llegar, solo tenga que descansar para seguir a la siguiente... porque la libertad también es convertir las metas en pausas...transformar el final para convertirlo en inicio.
Llenándome los días de caminos, caminos para mirar...